El alcalde electo de Cuernavaca José Luis Urióstegui Salgado, lamentó los recientes asesinatos perpetrados en contra de tres líderes sociales y activistas en la capital morelense.
“Es imperante que la fiscalía general del Estado de resultados en las indagatorias para disipar cualquier duda en torno a estos”, expresó esta mañana, previo a la firma del convenio general de colaboración con la Asociación Civil denominada “Profesionistas y Asociaciones Unidas a favor de la Sociedad”, realizado en “Los Belenes”.
Enfatizó que si se trata de un móvil personal no vinculado a la actividad pública de liderazgo de las víctimas, da una connotación distinta a los homicidios dolosos, pero advirtió que si hay una autoría intelectual vinculada con intereses de manejo de algún servicio público, la connotación es distinta y más preocupante, por lo que urgió al fiscal Uriel Carmona Gándara a esclarecer los hechos violentos registrados en tan solo cinco días.
El pasado jueves Rafael Botello Martín, expresidente del Club Rotarios de Cuernavaca, fue asesinado a balazos al norte de la ciudad al salir de un domicilio. La víctima fue uno de los principales promotores en la recaudación y donación de alimentos para perros y gatos que quedaron sin hogar tras el sismo del 19 de septiembre de 2017, pero también hizo importantes gestiones altruistas para enfermos de diálisis.
Esa misma noche sobre avenida Universidad también al norte de Cuernavaca Rodrigo Morales Vázquez perdió la vida al recibir varios impactos de arma de fuego, al estar sentado sobre la banqueta frente a una institución bancaria comiendo unos esquites.
Morales Vázquez fue uno de los principales actores para el cierre del relleno sanitario de Loma de Mejía una década atrás y con la reactivación del lugar en enero pasado también encabezó diversas acciones para que de nueva cuenta fuera cerrado.
El ambientalista y reciclador fue amenazado de muerte tras intervenir en los disturbios ocurridos en la calle Subida a Chalma, el mes pasado, cuando varios vecinos de la tercera edad se apostaron sobre la vialidad para impedir el paso de los camiones recolectores de basura y sus conductores golpearon salvajemente a los opositores.
Este martes Alejandro García zagal “Chepe”, fue ultimado a balazos en la casa de gestión donde despachaba en la Colonia Antonio Barona.
En días recientes, “Chepe” encabezó diversas acciones al convocar a una huelga de pagos tanto de impuestos municipales como del agua, al acusar que el alcalde Francisco Antonio Villalobos Adán y la directora del SAPAC solo buscan beneficio económico sin solventar las graves deficiencias en los servicios municipales.