Por La Entidad Superior de Auditoría y Fiscalización (ESAF) debe desvincularse del Congreso del Estado para que sea, de manera efectiva, un órgano autónomo que exija cuentas a las autoridades pero también interponga las sanciones, sin la aprobación de las los diputados que sólo entorpecen el proceso, declaró Roberto Salinas de la organización Morelos Rinde Cuentas.
El activista subrayó la importancia de mejorar los procesos en materia de transparencia para la elección de las y los titulares de diversos organismos como la Fiscalía, las y los magistrados tanto del Tribunal Superior de Justicia como de Justicia Administrativa, de las diversas Comisiones como la de Víctimas o Derechos Humanos y del Instituto de la Mujer, entre otras.
Asimismo, subrayó la necesidad y urgencia de desvincular a la ESAF de los intereses del Poder Judicial para que, “no sea el o la responsable de una Comisión que obedezca a otro tipo de intereses quien apruebe o no las auditorías que la Entidad realiza a municipios, Gobierno del Estado y todas aquellas entidades u organismos que operan con recursos públicos, porque en ocasiones las auditorías están hechas pero los expedientes se quedan en el cajón”, acusó.
Cuestionado sobre la extinción de la Entidad y la creación de un nuevo organismo, idéntico pero que dependa totalmente de quien preside la Comisión de Hacienda en el Congreso del Estado, Roberto Salinas expresó su opinión en contra al considerar que dicho monopolio no abona al proceso de transparencia ni rendición de cuentas.
