El alcalde de Cuernavaca José Luis Urióstegui Salgado, separó del cargo a cuatro servidores públicos entre los que se encuentran el secretario de Desarrollo Sustentable, Pablo Aguilar Ochoa; la coordinadora de Protección Civil, Paola Hernández Vargas; Denia Brito, directora de Barrancas y Raymundo Nova, director de Infraestructura.
En la narrativa, el munícipe estableció que tras el peritaje solicitado por Aguilar Ochoa al Paseo Ribereño que estableció el mal estado del puente colgante, tanto la dirección de Barrancas como de Infraestructura realizaron obras de remediación de mala calidad e inservibles, sin verificación de Protección Civil.
Tanto los directores como la coordinadora fueron cesados en tanto Aguilar Ochoa, presente en la rueda de prensa, fue quien hizo el anuncio de la separación del cargo “de manera temporal” en tanto se fincan o deslindan responsabilidades debido a que los dos directivos son sus subalternos.
Será la Contraloría Municipal la que determine la responsabilidad administrativa en tanto las Fiscalías General de Morelos y la de Anticipación las que determinen los delitos penales.
A pesar de las 72 horas transcurridas tras el desplome del puente, el edil aún no puede descifrar quién o quiénes cambiaron el trayecto del recorrido, que de manera inicial no contemplaba el paso por el puente colgante.