Dulce Gabriela Flores González, madre de dos menores retenidos ilegalmente por el padre biológico, fue hallada sin vida en un hotel del Estado de México.
La mujer, de 31 años, fue reportada como desaparecida el pasado domingo en el municipio de Cuautla, al oriente de Morelos, cuando salió de su domicilio la tarde del sábado, sin llevar consigo ni su teléfono celular ni identificaciones.
La tarde del pasado miércoles, la víctima fue identificada por sus tatuajes por sus propios familiares y están a la espera del resultado de la necropsia para conocer la causa de muerte, pero reportes preliminares señalaron que su cuerpo se encontró golpeado.
Dulce Gabriela, quien desde 2015 tenía la custodia legal de sus hijos, libró una batalla contra la violencia vicaria por más de un año.
En enero del año pasado, llegó a un acuerdo con José Israel, padre biológico de sus hijos Santiago Israel de 12 años y Fernando Josué de 8, para que ambos cursaran el ciclo escolar en Celaya, Guanajuato, donde reside el sujeto y su pareja Yeraldy Hernández, sin embargo, cuando llegó la fecha de su entrega, éstos se rehusaron a entregar a los menores de vuelta con su madre.
Por varios meses, Dulce Gabriela intentó por la vía legal el regreso de sus hijos, sin embargo, los jueces Gabriel Cesar Miranda Flores y Laura Galván, quienes laboran en un juzgado de Zacatepec, Morelos, otorgaron la guardia y custodia de los menores al padre biológico, debido a un proceso por violencia que abrieron en su contra sin notificarla.
En mayo pasado, Fernando Josué fue muerto a golpes presuntamente por su padre y madrastra, quienes están vinculados a proceso por homicidio en Celaya; la custodia de su hijo adolescente fue otorgada a la familia paterna y la semana pasada, el padre de la víctima se suicidó.