La falta de agua, pasto adecuado y los altos costos de alimentos han llevado a una disminución significativa en el peso de las vacas lecheras en Tehuixtla, lo que ha impactado negativamente en la producción de la leche, y con ello en sus derivados, como el queso.
Según señaló uno de los ganaderos locales, la producción láctea ha experimentado una caída de hasta un 30 a un 40%, lo que significa que productores que solían obtener más de 100 o 120 litros de leche diarios ahora están produciendo solo 80 o 70 litros, o incluso menos.
Esta reducción en la producción ha afectado las ganancias de los productores, ya que deben invertir más en el acarreo de agua para sus vacas debido a la falta de lluvias.
El ganadero destacó que la falta de agua también ha afectado la producción de leche por vaca, ya que, en condiciones normales, una vaca puede producir alrededor de 10 litros de leche, pero debido a la escasez de agua, esta cifra ha disminuido hasta en un 30%, resultando en una producción de tan solo 3 litros por animal.
Esta situación también afecta la calidad de la carne, ya que el porcentaje de carne en vacas destinadas para consumo en mercados también se ve afectado.
Tehuixtla es conocida por ser una zona destacada en la producción de ganado lechero, lo que resalta la importancia de abordar estos desafíos para garantizar la sostenibilidad de la industria láctea en la región.