“A partir del 1 de julio serán cancelados todos los permisos de quienes no pagaron, ya no habrá oportunidad del refrendo y serán retirados de las calles todos los vendedores ambulantes que no estén regularizados”, amagó el secretario general del ayuntamiento de Cuernavaca, Carlos de la Rosa Segura.
Señaló que desde el inicio de la actual administración municipal se sentaron las bases para el reordenamiento del comercio informal, principalmente en el primer cuadro de la ciudad, “la mayoría de los grupos que aglutinan a los vendedores ambulantes cumplieron con lo establecido en los acuerdos, no así el Nuevo Grupo Sindical (NGS) que nos trae a la vuelta y vuelta sin regularizarse”, acusó.
Por lo anterior, advirtió que será a partir de lunes próximo que se realicen los operativos con los verificadores municipales, la Guardia Nacional, elementos de la policía Municipal, Derechos Humanos y hasta la fiscalía, para el retiro de las calles de los ambulantes y quienes se opongan, sus mercancías serán confiscadas y ellos remitidos ante un juez, detalló.
De acuerdo a lo estipulado por De la Rosa Segura, al inicio de la gestión municipal el padrón ascendía a 3 mil 200 vendedores que presuntamente estaban regularizados, sin embargo, en la revisión de la documentación el número se redujo a mil 600, de los cuales 400 se encuentran instalados en el centro histórico de Cuernavaca, que a su decir cuentan con la documentación en regla, los pagos al día y respetando, dijo, los espacios para su ubicación.