El acuerdo aprobado el pasado miércoles en la sesión de instalación de la Sesión de la Diputación Permanente fue legal, aseguró el diputado de Morena Alejandro Martínez Bermúdez, integrante del llamado G9.
En contraste, el panista del G11 Ángel Adame Jiménez advirtió que se debe verificar si éste fue legal, de lo contrario actuar en consecuencia.
Ayer, las diputadas de las bancadas del PES Morelos, Mirna Zavala Zúñiga; de Morena, Macrina Vallejo Bello y de RSP, Erika Hernández Gordillo, aprobaron un acuerdo que dejó sin efecto el tomado el pasado 12 de diciembre por el G11, en el cual “borraron” de todas las comisiones a las diputadas de los Grupos y Fracciones Parlamentarias referidas además de la representante del PT, Tania Valentina Rodríguez Ruiz, y dieron “golpe de timón” a Paola Cruz Torres de la presidencia de la Junta Política y de Gobierno.
Este día los legisladores coincidieron en el Museo de la Ciudad de Cuernavaca, durante la instalación del Consejo Municipal de Seguridad Pública del cual ambos forman parte.
Por separado, cada uno afirmó tener la razón en cuanto a los procesos registrados las últimas horas y semanas.
Martínez Bermúdez declaró que sus homólogas actuaron conforme a derecho, aún a pesar del abandono de la sesión por parte del presidente y de la vicepresidente de la Mesa Directiva, Francisco Erick Sánchez Zavala y Luz Dary Quevedo Maldonado, respectivamente, sin que la sesión fuera oficialmente suspendida o clausurada, y sin que el presidente haya nombrado a un sustituto del cargo o de la vicepresidente como lo marca el reglamento del Congreso.
Además acusó que el primer afectado al quedarse sin la presidencia o integración de comisiones fue él, y del despido injustificado, dijo, de 20 de sus colaboradores.
En tanto, Adame Jiménez recordó que el acuerdo del 12 de diciembre pasado fue legal y el actuar de las diputadas ayer debe someterse al escrutinio legal, al tiempo que instó al diálogo a fin de dirimir diferencias que han llevado a una parálisis legislativa, finalizó.