El médico pediatra Jorge Israel Hernández Blanquel, adscrito al Hospital del Niño y el Adolescente Morelense reconoció que las consultas por abuso físico y sexual en menores han aumentado en el periodo de confinamiento.
Anteriormente las consultas por este tema eran de 1 cada dos semanas, pero una vez iniciada la contingencia sanitaria y el resguardo domiciliario, aumentó hasta 2 casos por semana.
Los menores que son detectados con este problema son referidos ante el Ministerio Público para su investigación, ya que más de un 80% los agresores son personas que comúnmente conviven con su familia, incluso sus propios familiares.
Cambios drásticos en el comportamiento de las niñas y niños, poco ánimo de realizar actividades que antes hacia, tristeza, enojo y miedo, son algunos de los síntomas de un menor agredido.