Este 24 de diciembre, durante la cena de Noche Buena, miles de familias estarán reunidas en el hogar, disfrutando y conviviendo, pero otras personas más, su labor no les permite estar con sus seres queridos, ya que son ellos quienes tienen que estar atentos por si se registra una desgracia.
Es el caso de los bomberos, quienes no solo tienen que realizar un sacrificio físico o en caso de atender una emergencia, también, tienen que privarse de estar con sus familias, en el calor de un hogar.
A lo largo del año, los bomberos ven a sus compañeros como su segunda familia, y la estación como su segunda casa, pero cuando llega el momento de privarse de estar con sus familias, el único deseo es que no haya emergencias o si las hay, que todos los bomberos regresen con bien a casa.
Aunque la mayoría de la gente respeta y admira a los bomberos, aún existe una parte de la sociedad que es ingrata, por lo que piden todos sean empáticos con los bomberos, policías, soldados y todo aquel que sacrifica su vida y su tiempo por los demás.
Por increíble que parezca, los bomberos no solo sacrifican momentos de felicidad, en muchas ocasiones, también su vida va de por medio por salvar la de otras personas, por que como dice su lema, “No te Conozco y aun así doy la vida por ti”.