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El caos imperó durante la aplicación de la segunda dosis de la vacuna Pfizer contra el virus causante de la enfermedad de la Covid-19, para personas de 50 a 59 años en la Unidad Deportiva “Fidel Velázquez” de Cuernavaca.
La inmensa fila iniciaba en la puerta principal de acceso de la Unidad deportiva, seguía por todo lo largo hasta llegar al Rastro municipal, ubicado a un costado, seguía por la calle San Andrés de la Cal hasta la Calle Vía del
Ahí la gente se formó por la Privada Petroleros pero también sobre la Vía lo que dio pie al primer caos.
Por espacio de dos horas la fila no se movió y la gente salió de la formación para averiguar las razones, solo para descubrir que en la intersección de la avenida y de la privada la gente de un solo lado era la que avanzaba.
Al mediodía y a pesar del clima nublado, la gente mostraba ya signos de cansancio y deshidratación además del enojo por la confusión.
Otros más llegaron hasta la puerta principal donde se dieron cuenta que de manera indiscriminada se permitió el acceso a personas que no estaban formadas, que provenían de otros municipios y en algunos casos que la inicial de su apellido no correspondía al grupo de la A-G.
Tampoco pidieron el comprobante de domicilio, dijeron otros más, y optaron por no regresar a su sitio sino buscar la oportunidad de también meterse en la fila lo que provocó el enojo de las decenas de personas cercanas al acceso principal.
Otra fila se hizo hacia Bulevar Cuauhnáhuac con dirección a Petróleos Mexicanos, eran apenas unas 30 personas pero la gente señalaba si alguna de estas personas no estaban discapacitadas o eran mujeres embarazadas y otra sesión de “gritos y sombrerazos” se gestó.
Los servidores de la nación no se dieron abasto, eran rodeados por decenas de personas que a gritos exigían una explicación por la desorganización.
Cuando el anuncio de que el biológico se había terminado, alrededor de las 13:00 horas, hubo confrontaciones verbales con el personal de salud y entre los mismos ciudadanos.
Por espacio de una hora no hubo información clara por lo que tuvo que llegar la Policía Municipal de Cuernavaca a poner orden, o al menos intentarlo ya que eran ignorados por los enojados ciudadanos.
La gente se arremolinó en la puerta y no permitieron la salida de los ya vacunados y tampoco el ingreso de las personas con alguna discapacidad o las mujeres embarazadas.
Uno de los siete elementos tuvo que alzar la voz y advertirles que en caso de que no despejaran las puertas de acceso y se formaran, no entrarían a recibir su segunda dosis.
Uno de los siervos de la nación, cuya actitud prepotente y altanera enardeció aún más a la gente, les dijo de manera tajante que no había más vacunas y regresaran al día siguiente, sin mayores explicaciones.
Fue hasta que otra de las servidoras de la nación salió a explicar que las dosis eran insuficientes para vacunar a cerca de 2 mil personas que aún hacían fila y pidió que regresaran a su lugar para que el personal firmara su hoja de archivo, requisito indispensable para acceder al puesto de vacunación y que debe contener el código QR, en caso contrario se les negara el acceso, lo cual ocurrió al menos con medio centenar de personas.
El aglutinamiento se debió a que durante la primera dosis en este rango de edad, se aplicó a personas provenientes de varios municipios ademas de Cuernavaca como Jiutepec, Yautepec, Temixco, Emiliano Zapata, Xochitepec e incluso Cuautla y Jojutla por lo que se les aplicó la segunda dosis en el mismo sitio y se recibirán a todas aquellas que recibieron la primera dosis en este sitio los días martes de la H-Ñ y miércoles de la O-Z, además de que se recibirá a quienes no fueron vacunados hoy y cuya hoja de archivo esté firmada.
Quienes son rezagados y buscan el biológico en su primera dosis y cuyo domicilio no esté ubicado en Cuernavaca, no serán admitidos y deben esperar nuevas fechas y sedes.
Finalmente entre la explicación de la servidora pública y la intervención de los elementos policiacos el orden se restableció pasadas las 15:00 horas, es decir unas tres horas antes de terminar la jornada.
