El mal fin de semana que ha vivido Checo Pérez en el Gran Premio de Mónaco acabó de la peor forma posible. El piloto tapatío tuvo que abandonar la carrera apenas unos metros después de la largada, tras ser chocado por el piloto de Hass, Kevin Magnussen.
Los pilotos avanzaban en las primeras curvas del circuito cuando Magnussen se estrelló contra el monoplaza número 11 de Pérez, provocando que el auto del mexicano quedara destrozado. El fuerte impacto también involucró al otro Haas, pilotado por Nico Hulkenberg.
Debido a la gravedad del choque, la bandera roja fue desplegada de inmediato y las actividades en pista fueron suspendidas.
El momento del accidente se viralizó rápidamente en las redes sociales, mostrando el dramático instante en que Magnussen colisiona con el monoplaza de Pérez.
A pesar de haber terminado la clasificación en el puesto 18, Pérez había comenzado la carrera en la posición 16 debido a la penalización impuesta a los Haas.