El ayuntamiento de Cuernavaca cerró tres bares ubicados en las avenidas Río Mayo y San Diego por diversas anomalías, tras un operativo realizado en las últimas horas.
Exceder el horario, presencia de menores de edad en lugares con venta de alcohol y falta de licencia de funcionamiento fueron las irregularidades, detalló el secretario del ayuntamiento capitalino Erick Santiago Romero Benítez, quien no dio nombres de los negocios bajo el argumento que “es información reservada”.
Explicó que a pesar de que el horario de funcionamiento de estos negocios está permitido hasta las 2:00 horas, desde el año pasado se tomó la resolución de limitarlo a las 00:00 horas tras la pandemia causada por el virus de la Covid-19.
Romero Benítez recordó que una vez solventadas las fallas administrativas, los propietarios podrán retomar sus operaciones luego de cubrir las multas correspondientes que ascienden hasta 17 mil pesos, pero en caso de no contar con las licencias será hasta que realicen el trámite correspondiente. En ninguno de los casos podrán reabrir sin haber regularizado su situación de lo contrario incurrirían en un delito, advirtió.
La revisión, hecha en una de las zonas comerciales más exclusivas de la capital morelense, se realiza tras los hechos violentos del pasado lunes donde tres hombres perdieron la vida y uno más resultó herido por un sujeto quien disparó contra las víctimas por defender a una mujer que era asediada por el presunto homicida.
El reclamo popular fue en torno a la falta de arcos detectores en el establecimiento conocido como “Casa Bacacho”, ubicado en Río Mayo. Sobre el tema, el alcalde de Cuernavaca Francisco Antonio Villalobos Adán, señaló que la propuesta es que los establecimientos con venta de alcohol deberán realizar, por lo menos, una revisión a los clientes, en caso de que sus posibilidades económicas no les permitan la instalación de los arcos, pero aclaró que dicha propuesta debe ser aprobada por el Cabildo para que se vuelva una normatividad a fin de que la ciudadanía no argumente que se violan sus derechos humanos por las revisiones.