El astro portugués, Cristiano Ronaldo, fue expulsado en la final de la Supercopa de Arabia. Ya con la tarjeta roja en su contra, el delantero del Al Nassr realizó un ademán que fue interpretado como la intención de golpear al árbitro central del partido.
En esta ocasión, CR7 no pudo ayudar a su equipo para levantar la Supercopa de Arabia, sino que, además, dejó en inferioridad numérica a sus compañeros a escasos minutos de terminar el juego, y se suma un trofeo más que Ronaldo no puede ganar.
Todo comenzó en una jugada sobre la línea de saque de manos, un jugador del Al Hilal, buscaba retrasar el partido alejando el balón del portugués para evitar el saque de forma inmediata, por lo que Cristiano reaccionó con un codazo contra su rival.
Fue ahí cuando el árbitro central expulsó a Ronaldo en el minuto 86’ prácticamente a nada del final, Al Hilal levantó la Supercopa con un marcador a favor de 2-1 final.