Luego del operativo federal realizado en Huitzilac, de manera extra oficial elementos de la Guardia Nacional y de la Sedena, confirmaron que fueron cuatro los aserraderos clandestinos desmantelados.
Desde las 02:00 horas del miércoles los elementos arribaron al sitio e irrumpieron en los lugares dedicados a la tala clandestina, en los cuales ya no había personas.
Toda la herramienta y motores usados para el corte de la madera fueron decomisados y trasladados en unidades federales.
Sin embargo una vecina de la zona denunció que durante el operativo que hubo se metieron a su casa y a su aserradero legalmente establecido y con permisos de la PROFEPA, de donde también se llevaron toda la herramienta.
Además, narró que del interior de su casa robaron más de 250 mil pesos, dinero que ocuparía para adquirir un motor nuevo para un camión de su propiedad.
Luego de los hechos los elementos federales se retiraron del municipio de Huítzilac, pero hasta el momento se mantiene una tensa calma.
El ayuntamiento de ese municipio decidió suspender labores y los mismos pobladores señalan que el alcalde se ha escondido y no ha dado la cara.