Por El bloque mayoritario del Congreso de Morelos (G15) blindó “a piedra y lodo” al fiscal “carnal”, Uriel Carmona Gándara al presentar cambios a la Ley Orgánica del propio Congreso en materia de ausencia de los titulares de organismos públicos, para que estos sean considerados como ausentes definitivos sólo en caso de tener una sentencia firme en su contra, entre otros considerandos.
Con solo unas cuantas horas de haber iniciado el tercer año de la actual Legislatura, las y los integrantes del G15 votaron de urgente y obvia resolución el dictamen presentado por el diputado Julio César Solís Serrano, férreo defensor de Carmona Gándara y lo turnaron a comisiones.
Los cambios propuestos más relevantes son en torno a que la ausencia de un titular de un organismo público se considere definitiva cuando, como en el caso de Carmona Gándara -que enfrenta diversos procesos legales en su contra-, haya una sentencia en firme y no a los tres meses como se establecía anteriormente.
Asimismo, le confirieron a la o el encargado de despacho, la personalidad como titular, es decir que puede hacer posesión del mismo con injerencia en temas presupuestales debido a que, como estaba contemplado previamente, no podía hacerlo.
Otra “joya” del dictamen es conferirle el fuero constitucional.
El dictamen fue votado a favor por el G15 en su totalidad, con el voto en solitario en contra de la legisladora de RSP, Erika Hernández Gordillo (del G5), la tarde del pasado viernes durante la sesión ordinaria que permanece en receso.
Ante las noticias que se daban a la par, con la liberación de Carmona Gándara por un juzgado federal (por sólo dos minutos), el tema quedó en suspenso y las y los legisladores ya no regresaron al Pleno a consumar su argucia legaloide para que el fiscal “carnal” se mantenga como tal, a pesar de estar señalado por la Fiscalía de la Ciudad de México de encubrir a feminicidas.
