Los señalamientos vertidos por la secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde, sobre presuntas complicidades entre el fiscal Uriel Carmona Gándara y el Congreso del estado, fueron tomados como una confrontación política y acusaciones al aire por la legisladora Andrea Gordillo Vega, del PAN.
Ante la exhibición hecha por la funcionaria federal durante la Mañanera, en torno al bloque mayoritario en el Congreso (G15) para modificar la ley y blindar la permanencia de Carmona Gándara en la titularidad de la fiscalía, a pesar de estar en prisión preventiva, la diputada reviró al afirmar que “corregimos las lagunas legales que existían en el tema”, dijo.
Acusó que quienes publican que entre el Poder Legislativo y la Fiscalía del estado hay un presunto pago de favores y duplicidad de nómina -al tener al personal de dicho organismo autónomo como asesores del G15 y viceversa-, retó a quienes replican dicha situación a presentar las pruebas o hacérselo saber a los propios señalados para que “alcemos la voz”, aseguró.
En tanto, la legisladora por Morena Mirna Zavala Zúñiga, refutó cualquier protección a ultranza a Carmona Gándara, “yo sí puedo hablar porque mi relación con el funcionario ha sido estrictamente institucional”, declaró, al tiempo de instar tanto a sus homólogos y a la ciudadanía en general a esperar el dictamen de la Cámara de Diputados que, a instancias de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, deberá pronunciarse en torno al tema del fuero en el caso específico de Uriel Carmona.