Por El legislador morenista Arturo Pérez Flores lamentó que sus homólogos no hayan acatado el resolutivo del Tribunal Electoral del Estado de Morelos (TEEM) que obliga al Congreso de Morelos a darle la presidencia de la Junta Política y de Gobierno, y temió que de nueva cuenta el Legislativo caiga en una parálisis.
Desde el pasado 31 de marzo, las y los coordinadores de las bancadas que integran la Junta Política debieron acatar el resolutivo que mandata reponer el periodo del diputado Pérez Flores como coordinador de su bancada, y por ende, la presidencia de la Junta por un periodo de seis meses, que debió ejercer del 1 de septiembre al 31 de enero pasados.
Sin embargo, sus propios compañeros de bancada -Macrina Vallejo Bello, Alejandro Martínez Bermúdez y Paola Cruz Torres-, lo desconocieron como tal y nombraron en su lugar a Vallejo Bello y en un segundo momento a Martínez Bermúdez, quien hasta el momento ostenta la coordinación y presidencia de la Junta.
“El Tribunal de un plazo a 24 horas y seguimos esperando a que las y los compañeros se adhieran a la legalidad, el fallo es claro y estamos en un limbo jurídico debido a que podrían impugnarse las decisiones que se tomen desde la Junta, de seguir así, lo que podría incluir algunos nombramientos”, señaló.
En tanto, el presidente del Congreso Francisco Sánchez Zavala, se deslindó del tema al asegurar que la decisión debe acatarse de primera instancia en la Junta Política y posteriormente darse a conocer a la presidencia para que dentro de una sesión, ordinaria o extraordinaria, se dé a conocer la determinación.
A la disyuntiva se sumó el descontento de Paola Cruz Torres, acusada de violencia política en razón de género por su homóloga Mirna Zavala al impedir su adhesión a la bancada de Morena, por lo que arremetió contra el TEEM y afirmó que dicho órgano se excedió en su resolutivo por lo que impugnó la sentencia ante la Sala Regional, en espera de ser revocada la sentencia; de lo contrario, podría quedar fuera de la próxima contienda electoral en caso de quedar inscrita en el padrón de agresores.
