Por El alcalde de Cuernavaca, José Luis Urióstegui Salgado, reiteró la petición al Ejecutivo del estado en elaborar una política criminológica y fortalecimiento de las policías municipales, a fin de evitar hechos de violencia como el del pasado jueves en Cuautla, que cobró la vida del regidor Alfredo Giovanni Lezama Barrera, de extracción panista.
“Expreso mis condolencias a la familia y reitero mi petición para una política adecuada a las necesidades en materia de prevención del delito, y de estrategias que lleven a la detención de las y los responsables”, expresó.
El funcionario también hizo hincapié en acciones orientadas al fortalecimiento de las policías municipales, trabajen o no bajo el esquema del mando coordinado, para que den más y mejores resultados y que no sean opacadas o sometidas, dijo.
“En Cuernavaca, a pesar de que seguimos con actos de violencia, estamos haciendo algo pero necesitamos que los tres niveles de gobierno participen, lo que pasó ayer es muy lamentable, la muerte del regidor con una carrera política provisoria por sus aspiraciones a la diputación”, expresó.
El alcalde fue cuestionado si en lo particular ha recibido alguna amenaza ante las aspiraciones manifiestas para repetir en el encargo en la capital morelense.
“No he recibido ninguna amenaza o advertencia, como saben trato de ser muy recto en mis actividades, no tengo temor de que algo me vaya a suceder porque no he afectado intereses y hemos hecho las cosas conforme a derecho, tratando de contener a la delincuencia para beneficio de la población, no tengo tratos oscuros con nadie”, puntualizó.
