Por Este ícono de la ciudad de Nueva York en Estados Unidos, fue un regalo de Francia por el centenario de su independencia y tuvo como nombre original “La libertad iluminando el mundo”, actualmente es conocida mundialmente como “Estatua de la libertad”.
Es una de las estructuras metálicas más famosas del mundo y para su construcción se recurrió a diferentes minerales. Aunque actualmente luce un color verdoso, en un principio lucía una cubierta café rojizo.
Esto se debe a que está hecha de capas de cobre de 300 paneles de 2.37 milímetros de grosor. Con el tiempo el material sufrió erosión y cambió de color., además su estructura interna es de hierro.
Esta elección no es gratuita, se trata del material favorito de Alexandre Gustave Eiffel, quien diseñó la estructura metálica interna de la estatua. En su construcción, además, participaron diferentes artistas plásticos e ingenieros, por ejemplo, el diseño de la estatua estuvo a cargo de Frédéric Auguste Bartholdi.
La altura de la estatua es de 93 metros, desde su pedestal hasta la antorcha. Este último elemento tiene una historia algo distinta al resto de la estatua. La antorcha fue la primera pieza que se entregó a Estados Unidos. En 1876 se mostró en la Exposición Universal de Filadelfia. Su antorcha original estuvo abierta al público hasta 1916 a causa de una explosión que dañó algunas partes de la estatua. En 1986 se cambió por una nueva que está cubierta por hojas de oro de 24 kilates. La antorcha original se exhibe ahora en el vestíbulo de la estatua.
El resto de la estatua llegó al puerto de Nueva York el 17 de junio de 1885. Para su transporte se dividió en 350 piezas que se colocaron en 214 cajones. 36 de estos cajones transportaron tuercas, remaches y pernos para armarla cuando llegara a su destino.
El pedestal se terminó de construir en 1886. El 28 de octubre de ese año se inauguró oficialmente la Estatua de la Libertad. Tiene una placa de cobre en su mano, está escrita la fecha: 4 de julio de 1776, cuando se firmó la Declaración de Independencia de Estados Unidos.
La Estatua de la Libertad es un ejemplo de lo que se puede construir con una idea clara y los materiales adecuados. Los metales que eligieron los ingenieros y escultores que la fabricaron van más allá de una estructura. Su cobre, hierro y oro dan forma a un símbolo de libertad reconocido en todo el mundo.
