La “férrea” defensa del Instituto Nacional Electoral (INE) duró solo 30 minutos en la Plaza de Armas de Cuernavaca.
El acto, organizado principalmente por expriístas, exfuncionarios y hasta zapatistas, se sumó a la movilización nacional en contra del llamado “Plan B” del presidente Andrés Manuel López Obrador para “destazar” al INE, que consiste en reducir al personal del organismo electoral, disminuir su autonomía y limitar su capacidad de descalificar a las y los candidatos que quebranten leyes electorales.
El grueso de los manifestantes era gente de la tercera edad, y varios de ellos ligados a las cúpulas del poder tanto del PRI como del PAN, como el caso de Teodoro Lavín León, quien presidió el entonces IFE Morelos en los tiempos de bonanza del PRI; Ricardo Dorantes San Martín, quien fungió como magistrado y fue candidato a diputado federal por el PAN en 2021.
También se hizo presente el nieto de Emiliano Zapata, Jorge Zapata, quien durante su discurso de apenas dos minutos afirmó “vamos a defender al INE para impedir que vuelva el PRI que tanto añora el presidente”, dijo.
El breve acto terminó entre consignas como “el INE se queda, López se va”, y el canto del himno nacional.