Por Existe un dicho coloquial respecto a los gases: “El que primero lo huele, debajo lo tiene”. En realidad, todos lo olemos y no es placentero. Esto se debe a que las flatulencias, en realidad son la expulsión de la infusión de un gran número de gases. Esto nos lleva a hacernos la pregunta ¿Por qué las flatulencias huelen mal?
La aerofagia contiene gases que nos tragamos, como el nitrógeno y el oxigeno, así como gases emitidos cuando la comida es procesada en nuestro sistema digestivo. Esto incluye hidrógeno, dióxido de carbono y metano. El intestino grueso también añade sulfuro de hidrógeno (que es particularmente oloroso) y amoníaco a la mezcla. Este proceso de creación del gas es un efecto secundario natural a respirar y comer. Pero obviamente, el cuerpo humano no puede contener indefinidamente una nube de gas que sigue expandiéndose, por lo que debe liberarla.
Cuando el gas sale antes de alcanzar al colon, lo hace en forma de un eructo. Debido a que los eructos no contienen tantos gases, son menos apestosos. Por otro lado, una flatulencia, acumula todos los gases y emana del cuerpo a través del recto, por lo que el resultado es mucho más oloroso. Mientras que expulsar estos gases es inevitable, puedes reducir su frecuencia evitando ciertos alimentos. La comida alta en fibra, como los frijoles, crean más gas. Los alimentos difíciles de digerir suelen crear una cantidad excesiva de gas, es por esto que quienes son intolerantes a la lactosa producen más de esta olorosa sustancia tras ingerir lácteos.
