El ayuntamiento de Cuernavaca “pidió fiado” a empresarios para que se solidaricen tanto con la comuna con la ciudadanía y se puedan tapar las coladeras, cuyas tapas fueron robadas o sufrieron averías.
Gerardo Abarca Peña, director de Servicios Públicos de Cuernavaca, explicó que al día reciben al menos tres reportes de coladeras abiertas, lo que representa un peligro tanto para el peatón como para los automovilistas, consideró.
“Estas tapas, en su mayoría, fueron robadas para ser vendidas por kilo como fierro, ya tenemos detectadas a varias personas que se dedican a ello, en su mayoría se trata de indigentes”, explicó. La problemática y la falta de solvencia económica orillaron a la actual administración municipal a pedir la solidaridad de empresarios para que el costo del material se pueda realizar a mediano plazo y en pagos.
Además, el funcionario adelantó que han considerado el uso de otros materiales que no sea atractivo para su venta pero ello está sujeto a la disposición de los propios empresarios.