“Por más de una década las autoridades municipales dejaron de dar mantenimiento a los tanques de agua y hoy debemos reponer al menos 33 contenedores”, reveló el titular del Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Cuernavaca (Sapac) Arnoldo Heredia Romero.
Las partes bajas de la ciudad son las que representan la mayor problemática por la presión, detalló; si sumamos las líneas viejas más la inyección directa a las redes se revientan las tuberías.
En total son 33 tanques que debemos reemplazar, incluido el del Miraval, que es de los más importantes en la ciudad; este año iniciaremos con cinco tanques con capacidad de 150 a 300 metros cúbicos, para mejorar el servicio, afirmó.
Heredia Romero recordó que desde el año pasado se ha trabajado en controlar las fugas de agua, “que son en las líneas de conducción que llevan el agua de las fuentes a los pozos y de éstos a los tanques; queremos que el líquido se deje de perder”, subrayó.