Autoridades de León, Guanajuato, cancelaron una fiesta de 15 años por reunir más de 800 invitados y violar las recomendaciones sanitarias establecidas debido a la pandemia por coronavirus. El festejo se llevó a cabo en la comunidad de Loza de los Padres.
Vecinos alertaron de dicha fiesta a la Dirección General de Fiscalización y señalaron que los invitados no tenían cubrebocas, ni respetaban las medidas de sana distancia. Momentos más tarde las autoridades procedieron a la suspensión de la celebración.
Por último la dependencia también suspendió dos fiestas más en la zona, una en Peñón de Medina con 300 invitados y otra en Santa Rosa Plan de Ayala con 450 asistentes.