Al menos unos 800 ambulantes se instalaron en el primer cuadro de Cuernavaca ante la cercanía del Día de Reyes.
A partir del día de ayer y hasta la madrugada del 6 de enero las y los comerciantes informales podrán realizar la vendimia, en la que impera la venta de juguetes, ropa y zapatos, sin embargo, el rubro de juguetes así como el llamado remate de mercancías tiene dos vertientes completamente opuestas.
El líder del Nuevo Grupo Sindical (NGS), Ben Hur Hernández, aseguró que quedará prohibida la venta de juguetes bélicos o que inciten al odio en el tradicional tianguis, establecido en las calles de Guerrero, Tepetates, Arteaga y Juárez en el centro de Cuernavaca.
“Estará prohibida la venta de juguetes bélicos, quienes sean detectados serán retirados del tianguis y se les decomisará la mercancía, incluso se le puede dar parte a las autoridades”, detalló.
Asimismo, negó que durante la noche y primeros minutos del día 6 de enero, se vaya a realizar el consabido remate de mercancías. “Eso es mentira, nosotros debemos liberar las calles a partir del sábado”, subrayó.
Sin embargo, Mario Lara, líder de las y los comerciantes Lido y Degollado contó una historia muy diversa, al afirmar que en dichas plazas “hay un descuento del 30 por ciento en los juguetes y para la noche y madrugada del sábado, el remate al 50 por ciento”, dijo.
La “cláusula” de la prohibición de los juguetes bélicos tampoco se cumplió; las armas de plástico camufladas, que emulan a las usadas por las fuerzas de seguridad o los criminales, abundan a lo largo de toda la calle de Guerrero, desde las primeras horas de su instalación, sin que líder o autoridad alguna las haya retirado.